¿ES BUENO ADELANTAR APRENDIZAJES?

Una cosa buena de este periodo de confinamiento es que nos ha posibilitado a los docentes recibir mucha formación por distintos medios on-line, lo que seguro que redundará en beneficio de nuestro alumnado.

Nos encontramos a vueltas de nuevo con la lectura y la escritura, inquietud que suele aparecer en 3º de infantil, pero parece que las preocupaciones de las familias se adelantan cada vez más, lo que  se ha acentuado  al no tener clases presenciales.

Como os decía, en uno de estos cursos de formación la ponente nos explica que no hay que tener prisa, que el cerebro tiene que estar preparado para dar el paso de leer y escribir, que nadie se ha quedado nunca sin conseguirlo.

Os dejo aquí un poquito de su charla. Merece la pena escucharle.

Ella es María Castellana,  y forma parte del primer congreso virtual de Educación Viva. Si estáis interesados podéis buscar más información en las redes, asociación CAIEV. Trabajan en torno a la creatividad, la naturaleza, todo lo emocinal...otras formas de ver a la infancia. Una maravilla. Como digo, muy recomendable.

GRACIAS A LA VIDA

Estos días de finales de mayo tienen un sabor agridulce; por un lado, la alegría de poder salir, aunque con precauciones, al exterior, reencontrarnos con las personas a quienes queremos, recibir el aire y el sol en la cara.
Por otro, la distancia física, la imposibilidad del abrazo. Algunos contactos,también, a través de la fría pantalla del móvil o del ordenador, que nunca sustituirá al calor humano.

Poco a poco. Retomemos nuestras vidas, nuestros anhelos, abramos corazones y confianza en la vida. Agradezcamos todo lo que nos llega de bueno, porque es un regalo.

Gracias a la vida.

Valoremos lo que tenemos.

APRENDER PARA LA VIDA

Una conversación reciente me hace reflexionar sobre qué idea tenemos de escuela, tanto familias como profesorado. O cuando menos, qué pensamos que es lo fundamental en ese lugar al que enviamos a nuestros hijos e hijas cada día.

Puedo entender que nuestros mayores depositaran toda su confianza en los saberes que poseía -a veces parecía que en exclusiva- el señor maestro, porque ahí era donde se recibían conocimientos y destrezas necesarios básicos para salir adelante en la vida.
Hoy, afortunadamente,  no es así.
Los expertos dicen que cerca del 75% de las profesiones del futuro no existen en la actualidad.
Muchas de las cosas que hoy se enseñan quedarán desfasadas en cuestión de años. Por eso, el punto de mira de la educación hay que enfocarlo hacia aprendizajes competenciales, que sean útiles en diferentes ámbitos. Desarrollar la creatividad, fomentar el trabajo en equipo, tener una mente abierta... por ahí va.

En la era de las nuevas tecnologías, los saberes académicos se pueden encontrar en cualquier ordenador; quien tenga un mínimo de curiosidad accederá a cientos de plataformas para aprender cosas tan diversas que van desde cómo hacer unas alcachofas con almejas dignas de Argiñano, hasta el alfabeto cirílico. Porque en internet está todo.

¿Todo?

El contacto humano es imprescindible para sobrevivir. Respeto, ecología, diversidad, aprendizaje en las pequeñas frustraciones, logros en la autonomía de cada niño y niña, lágrimas, risas... Canciones en el grupo, bailes, abrazos, miradas, amor a la lectura, investigación de pequeños proyectos, cómo nace la mariposa de esos puntitos que antes eran huevos, el caracol que un día se arrastró dejando su baba por nuestra pizarra, la rodilla que con tanto amor curó Manolo...

Eso es lo que se aprende en la escuela.
A partir de ahí... lo demás.

Ojalá que pronto recuperemos estos momentos.
Mientras tanto, aprovechemos al máximo la cercanía de nuestros peques. Esta es la parte buena.
¿Verdad?

COMPARTIENDO IDEAS

Decía Bernard Shaw: "si tu tienes una manzana y yo tengo una manzana y las intercambiamos, entonces ambos aún tendremos una manzana. Pero si tú tienes una idea y yo tengo una idea y las intercambiamos, entonces ambos tendremos dos ideas".

Este periodo de enseñanza-aprendizaje a distancia,  obligado por las circunstancias,  me está enseñando lo potente del intercambio de ideas. Hablando con las familias surgen propuestas, actividades, reflexiones que quizá en el día a día del aula no podemos permitirnos, a veces por falta de tiempo y espacios para estos intercambios.

Me contaba una mamá cómo estuvo el otro día con los niños en la charca del pueblo, y que en su camino encontraron una gran tortuga que devolvieron rápidamente al agua.

A partir de ahí, ambas coincidimos en lo interesante que sería trabajar un proyecto sobre la fauna y flora de la zona. Me lanzó un torrente de ideas: hacer un diorama, recoger las actividades de pesca, tarjetas con fotos y escritura, aprender sobre cangrejos, lucios, libélulas, caracoles, kattalingorris, patos machos y hembras, patitos, plantas diversas... Una gran cantidad de posibilidades que llevadas al aula suponen un aprendizaje realmente significativo y pegado a la realidad y al contexto ambiental.

En cuanto tengamos posibilidades, iremos a por ello...
¡Gracias Marta!

NADA ES IMPOSIBLE

El candidato español hace unos años al premio Global Teacher Prize (equivalente al Nobel para los docentes) al mejor maestro del mundo, César Bona, habla estos días sobre lo importante y lo secundario en la educación.

César, trabajador "de pueblo" es un auténtico aliado de los niños.un entusiasta de la enseñanza desde la ilusión. Defiende la importancia de la creatividad, la cercanía, la alegría ante los pequeños descubrimientos de cada día. En su libro La nueva educación da muestras de su buen hacer con anécdotas divertidas y propuestas novedosas desde la simplicidad. Cuenta, por ejemplo, cómo consiguió la reconciliación entre dos familias de un pequeño pueblo por medio de la colaboración entre ambas para preparar una película de cine mudo con los pequeños. O el éxito cosechado por un alumno de etnia gitana con el que negociaba cada día ratos de trabajo con momentos para tocar el cajón en clase. O el niño que dio una conferencia cuando apenas se atrevía a hablar... y así incontables historias que conmueven por el amor que destilan.

Si leyera estas líneas diría que no es él, sino los niños y niñas, quienes  le enseñan y alcanzan logros de este calibre.

Quedémonos con estas palabras:

"Encontraremos piedras en el camino, hagámonos a la idea, pero compartir el mundo de los niños nos ayuda a entender que nada es imposible".

Un rayo de optimismo en estos tiempos de incertidumbre.

PEQUEÑAS HISTORIAS

Hoy traigo dos mini-cuentos, de cosecha personal.

Uno de ellos  nos presenta la tristeza silenciosa  de un niño que se siente al margen de los demás, y cómo unas pocas palabras -ven a jugar con nosotros- le hacen sentirse acogido, y su cambio a la felicidad más absoluta.

En el otro,  pasamos de la oscuridad a la sorpresa que depara a los personajes de la historia, iluminándola.

Os sugiero mostrárselos a vuestros peques, y observar sus reacciones.

Allá van...

https://drive.google.com/file/d/1hi04i1lNT7XgCvMx0MD-ILdLaT7y9W17/view

https://drive.google.com/file/d/1LxhYDDm_w-UWzHT9FOIuisFgIXzAt1ya/view

QUE SEAN FELICES

Cuando mis hijos eran pequeños, en el cole nos hicieron una pequeña encuesta. Entre las preguntas, había una que decía algo así como ¿qué quieres para tus hijos en la escuela? empiezas a pensar entonces en grandes cosas sobre educación y aprendizaje, herramientas para la vida, conocimientos...

Creo recordar que en aquellos momentos dejé a un lado mi vertiente de maestra y respondí "que sean felices".

Ser feliz no significa tenerlo todo, no supone no encontrar obstáculos ni retos, dejar de  pasar por pequeñas frustraciones que ayudan a crecer... Ser feliz es disfrutar cada día de lo bueno, ir con ganas de encontrarse con amigos y mayores, no sufrir angustias absurdas por exámenes o por no sentirse a la altura, reconocer que cada una, cada uno, tenemos fortalezas que compartir y debilidades que abrazar.
Saber que estamos en un entorno seguro y protegido donde seremos acogidos, tal como somos.

 Mis hijos ya son mayores, y  en su recorrido escolar han tenido la suerte de encontrarse con magníficas maestras y maestros, pero también con pésimos profesores que solo han visto el puntito oscuro en la enorme hoja en blanco.

De todo hay, como en todas partes. Vamos a prepararles para lo que se encuentren, ayudándoles siempre a encontrar lo positivo en sí mismos y en los demás.

¿IMPORTA LA EDUCACIÓN INFANTIL?

Es curioso escuchar, cuando se habla de educación, que los primeros seis años de vida son los más importantes en el ser humano, por su desarrollo cerebral, emocional, motor, afectivo...
Si preguntas -tanto a profesionales de la educación como a legos en la misma- todos te dirán cuánto valoran esta etapa.

Pero hete aquí que, a la hora de la verdad, las escuelas infantiles -0-3 años- han sido durante mucho tiempo consideradas como meras guarderías, y las aulas de 3 a 6 años, lugares donde ...¿ juegan? ¿cantan? ¿hacen fichitas de muchos colores?. Y cuanto más cerca de los 6 años, copian, leen, escriben números, y ahora... hasta saben inglés/francés/alemán...

Parecía que estábamos empezando a ser valorados, como etapa en sí misma, no sólo para entrenarnos para la educación "de verdad", la de aprender "en serio", sino como unos años fundamentales que dejarán una importante huella para el resto de su escolaridad y de toda su vida.

Ahora, se está debatiendo sobre cómo -y cuándo- será la vuelta a las aulas. Se habla mucho de tecnología, clases on-line, se imparten a toda mecha cursos a docentes para "la nueva normalidad"; el que sabe y puede, adelante, el que no... adelante también.

¿Y los niños y niñas más pequeños? ¿pensamos que con fichas, vídeos, vamos a educarles? cómo les daremos el calor que necesitan, los amigos, sus juegos, el consuelo? ¿ A través de una pantalla?

En ningún momento he leído ni escuchado ninguna propuesta seria al respecto de este tramo educativo, que incluya aumento de profesorado, espacios más diáfanos, apoyo emocional a maestras y familias.
Parece que con unas mascarillas, jabón  y una conexión wifi tiraremos para adelante.

Desde aquí, una llamada a las familias, expertos y cargos de la administración en cuyas manos estamos.

No tiremos por la borda todo lo alcanzado.

Para nosotros, profesionales de la educación, esto no están siendo unas vacaciones. Echamos de menos a nuestros niños, y queremos hacerlo lo mejor posible en el periodo que se avecina.

Las maestras y maestros nos lo tomamos muy en serio, porque amamos nuestra profesión.
Como dice Carmen Díez Navarro "un maestro ético es el que se toma su trabajo como algo muy serio y muy alegre. El que considera a sus alumnos como personas a las que acompañar en sus aprendizajes y sus sentimientos, el que se anima a escucharlos, a respetarlos y a hacerles un hueco en su corazón".

Queremos hacernos oír.
Y escucharles.

Gianni Rodari

NATURALEZA PEQUEÑA

Después de tantos días encerrados, es un buen momento para disfrutar de la naturaleza, en la medida en que podamos. No hace falta ir a sitios lejanos, exóticos, especiales... cada detalle que nos rodea y que normalmente nos pasa desapercibido, está esperando ahora a ser redescubierto: el rocío de las primeras horas, la corteza de un árbol, unas florecillas silvestres, de esa que salen hasta entre las baldosas. Hormigas, mariquitas, bichos que tanto entusiasman a los niños.

Recordad: cuando salgáis, admirar la belleza de las cosas pequeñas y ayudad a nuestros peques a valorarlas.
Están ahí para nosotros.

EL VENDEDOR DE ALEGRÍAS

Hoy llueve. Domingo tristón y con incertidumbre sobre la vuelta escolar, cómo, cuándo... y las preocupaciones importantes con el trabajo de cada cual, la situación de nuestros mayores, la continuación de nuestras vidas en general.

Tratemos de darle una vuelta al tema y ofrecer una sonrisa a nuestros niños.
Que no se sientan abrumados por nuestras inquietudes. Preservemos, en lo posible, la alegría de la infancia.

Aquí os dejo este cuentecillo...

SIEMPRE TE QUERRÉ

Entre las lecturas que me acompañan en estos días he encontrado un librito titulado "100 ideas para que tus hijos sean autónomos" (Anne Bacus). Me ha gustado mucho el capítulo 2 titulado "Plantar las raíces. El amor es la base". En él nos habla del amor sin condiciones, de que, para llegar a ser autónomo,  un niño necesita sentirse incondicionalmente amado y acogido con ternura.
Eso no quiere decir ser permisivo, no poner límites, dejar pasar conductas inadecuadas... Al contrario, una crianza sana pasa por ayudarle a crecer, pero siempre sin el chantaje (mamá se pone triste si... pues ya no te quiero... eres mala...). Nuestros hijos e hijas tienen que tener claro que lo que queremos es entender y ayudarles a corregir,  si es necesario, su conducta, pero que, pase lo que pase, SIEMPRE serán queridos.

Hay un álbum ilustrado precioso precisamente con este título Siempre te querré, pequeñín, de Debi Gliori.

Aquí os lo dejo. Espero que os guste tanto como a mí.

MIEDOS

Estamos viviendo una etapa complicada para todos:  adultos, pequeños, ancianos... Y a la realidad de la enfermedad se une el miedo. Miedo a perder la salud -propia pero sobre todo,de quienes más queremos-, a las consecuencias económicas, sociales... Es normal, natural e incluso sano. El miedo en el ser humano cumple un papel adaptativo, forma parte del desarrollo y nos ayuda a sobrevivir.

En esta crisis, los niños y niñas que nos rodean están siendo partícipes de la situación, colaborando de manera ejemplar. Está muy bien que les informemos y sobre todo, que les enseñemos a tomar precauciones. Pero no hay que olvidar su edad, por lo que la información se la daremos en la medida en que la pidan  y de forma que puedan comprenderla, evitándoles, si es posible, un exceso de exposición a los medios -vídeos, noticias, imágenes duras...-. Que vean, eso sí, la parte positiva de la solidaridad y la entrega, de todas las cosas buenas que, a pesar de todo, están naciendo de estos complejos momentos.

Que no aprendan a vivir con miedo... prudencia, sí, pero mirando hacia adelante.

MADRES

Hoy es un día muy especial para todas las madres -también para las abuelas, que al fin y al cabo son madres por partida doble- que celebramos de una forma diferente.
Quienes aún tenéis niños pequeños, a vuestro cuidado, más cerca que nunca; para quienes nos han crecido y han iniciado su vuelo, en la distancia.

Pero siempre cerquita del corazón.

¡Feliz día de la madre!

ACOMPAÑAMIENTO EN LAS EMOCIONES

El título que da nombre a este blog habla de las emociones que atraviesan los niños durante la infancia.

Este tiempo largo de confinamiento, seguramente, habrá hecho aflorar sentimientos de todo tipo: enfado, aburrimiento, miedo, alegría, incertidumbre... aunque ellos no sepan ponerles estos nombres.
Los adultos, por otra parte, sentimos las mismas cosas -solo somos, en realidad, niños crecidos- pero tenemos una experiencia que nos ayuda a gestionarlas.

Esto es lo que los niños y niñas necesitan, ahora y en todo tiempo; ser acompañados y sentir que les comprendemos, escuchar sus inquietudes -a veces no expresadas verbalmente, pero sí en sus actitudes- y ayudarles a dar respuesta a sus preguntas.

No somos magos, solo personas que les queremos y que, eso sí, ocurra lo que ocurra, estaremos a su lado para ayudarles.

Y YA ESTAMOS EN MAYO...

 Hoy cambiamos de mes. Entramos en mayo, con más grises que amarillos... pero con la alegría de poder pisar la calle; desde hace unos días, niños y niñas, y a partir de mañana también los más mayores, en horario controlado. Los que tenéis la suerte de vivir en una población pequeña,  sin restricciones, salvo, eso sí, las que dicta el sentido común.

A disfrutarlo, pues...